El pasado lunes 26 de febrero, la emblemática plaza central de Altos de Chavón se convirtió en el epicentro de la celebración por el 180 aniversario de la independencia de la República Dominicana. Desde las 7:30 de la noche, decenas de personas se congregaron en este pintoresco lugar para sumergirse en una atmósfera cargada de patriotismo y alegría.
La música en vivo, a cargo de la orquesta Gold Cocotropical, resonó en cada rincón, poniendo a bailar a todos al ritmo de contagiosos merengues. Las piedras de Altos de Chavón, iluminadas con los colores patrios rojo, azul y blanco, sirvieron de telón de fondo para una noche inolvidable.
El espacio se transformó en un verdadero festín visual, decorado con carritos de golf adornados con elementos típicamente dominicanos como plátanos, frutas frescas, tamboras y la imponente bandera nacional ondeando con orgullo. Además, se dispusieron stands de cigarros, artesanías, comida y bebidas, así como productos promocionales de Casa de Campo, en un homenaje a la riqueza cultural y gastronómica de la isla.
El momento estelar de la velada llegó con la participación de una vibrante comparsa de carnaval dominicano, que inundó el ambiente con su energía desbordante, colores vibrantes, risas contagiosas y muchos globos para los más pequeños. Entre los personajes tradicionales que animaron la noche se encontraban el típico mono, Roba la Gallina, diablos cojuelos, un grupo de Guloyas, sancos y una variedad de seres fantásticos que deleitaron a todos los presentes.
Para la gerencia de Altos de Chavón, este evento reviste una importancia especial, ya que fortalece el sentido de orgullo dominicano y resalta la belleza y diversidad de la cultura de la isla. Sin duda, esta celebración quedará grabada en la memoria de quienes tuvieron el privilegio de vivirla, como un testimonio vivo del espíritu festivo y la identidad nacional de la República Dominicana.